Es cierto que nos encanta compartir nuestros triunfos con alguien, y qué mejor que con tu pareja. Sin embargo, primero tienes que amarte a ti misma antes que alguien más.
¿Qué tan difícil es amarte a ti misma?
La mayoría de las personas, aún nos encontramos en la búsqueda de algo que nos haga sentir bien. Nuestro corazón se encuentra desconectado de la mente y pensamos que algo esencial nos falta para ser felices y amarnos a nosotros mismos. Es por ello que hay personas que no logran ser dichosas consigo mismas y no saben estar solas porque se sienten vacías en su interior.
La sociedad nos ha condicionado a creer que recibir cariño y amor de los otros es lo que llenará ese vacío y nos hará sentir plenos. Sin embargo, esa idea es totalmente errónea.
Amarte a ti misma es muy sencillo
Debemos recordar, que para poder estar en una relación, primero tenemos que estar bien y amarnos a nosotras mismas. Como dice el dicho “en el dar está el recibir”. Y por ello, es necesario darnos todo el amor posible. No podemos pedir amor a otro, si no empezamos por nosotras mismas.
También es muy importante que te conozcas para que sepas qué cosas son las que te gustan y cuáles no, para así poder llevarlas a cabo sin ninguna complicación. Gracias a ello logras comprender quién eres y qué cosas son realmente importantes para ti.
Mientras estemos bien con nosotras mismas, no requeriremos de nadie para llenar esos huecos emocionales que tengamos; sino al contrario, buscaremos a alguien con quién compartir esos momentos de felicidad, pero sólo eso, porque nos amaremos a nosotras mismas plenamente.
No necesitaremos refugiarnos en la vida de otros para evitar nuestro sufrimiento o carencias.
Recuerda siempre, la persona a la que más debes amar siempre, es a ti misma. Consiéntete, respétate y cuídate.
Si logras amarte a ti misma, todos tus ámbitos en la vida estarán llenos de bienestar emocional. Y esto lo lograrás fácilmente con comprensión, compromiso hacia ti misma y entrenamiento todos los días.
¡Así que jamás olvides amarte a ti misma!