El amor cambia tu percepción del mundo, te guste o no, para bien o para mal. Me gustaría decirte que el cambio siempre será bueno, pero hay ocasiones en que no lo es. Aún así, cada experiencia tiene que servirte como un aprendizaje. Éste te recuerda qué es lo que mereces y qué es lo que jamás debes permitir. El amor influye de modo tal en ti, que es probable que presentes los siguientes cambios.
1. Torbellino de emociones
Cuando el amor toca tu puerta, tu cuerpo y tu mente comienzan a sentir sensaciones que a veces te sacan de onda. Digamos que no hay estabilidad en tu persona, te invade la emoción, pero al mismo tiempo la ansiedad o la felicidad.
2. Actúas de manera arriesgada
Además de todas las emociones que experimentas en una pequeña fracción de tiempo, también sueles volverte más arriesgada. Te sientes tan bien contigo y con la otra persona, que no tienes miedo de arriesgarte.
3. Tolerante
Aprendes a ser tolerante con la otra persona y evitas explotar sin más, pues sabes que eso podría ocasionar una discusión y es lo que menos quieres.
4. Empática
El amor cambia tu forma de percibir al otro, por lo que eres empática con él. Comprendes y tomas las decisiones con otra mentalidad.
5. Todo es lindo a tu alrededor
Cuando estás enamorada sientes que flotas e, incluso, ves hermoso lo más feo. Así es, el amor cambia tu manera de percibir tu entorno, haciendo que te sientas bien a cada instante.
6. Sobreprotectora a más no poder
Al mismo tiempo, además de ser feliz y estar en una montaña rusa de emociones, sacas tu lado sobreprotector. Te preocupas por el bienestar de la otra persona, si ya comió, si está bien. Todo lo que le pase te interesa.
7. Te cuesta trabajo concentrarte
Gran parte de tu día se te va en pensar en esa persona especial. A veces te cuesta trabajo concentrarte en tus actividades porque andas en otro planeta.
8. Sacas tu lado cursi
Al sentirte enamorada y correspondida, no temes sacar tu lado más cursi. Con él le demuestras a tu pareja lo bien que te hace sentir. Incluso no temes ser la más cursi del mundo, con tal de que él sepa cuánto lo quieres.
9. Irradias brillo y felicidad
Cuando estás enamorada, puede que tú no lo notes, pero toda la gente que está a tu alrededor sí. Irradias un brillo especial y en tu rostro se esboza una sonrisa enorme.
10. Eres feliz y quieres que todo el mundo lo sepa
Tanta es la felicidad que sientes, que quieres que todos en tu entorno lo sepan y lo compartan contigo.