La piel de cada persona tiene características que la hacen única, aunque también los hábitos repercuten de manera directa en su estado. La alimentación, genética y otros factores determinan el tipo de piel de cada una de nosotras. Y cada uno necesita cuidados específicos para mantenerla en las mejores condiciones. Pero, ¿sabes qué crema debes usar? Hay una crema para cada tipo de piel; usar la apropiada te dará mayores beneficios.
Cremas para cada tipo de piel
La piel puede diferenciarse en tres tipos distintos: mixta, seca y grasa. De acuerdo a las características de cada una de ellas, será los recursos que necesite. No se puede usar lo mismo para una piel seca que para una piel grasa. Sabiendo eso, es más fácil poder elegir una crema que te aporte los beneficios necesarios sin dañar tu piel.
Piel seca
La piel seca se caracteriza por tener los poros pequeños y aspecto quebradizo. Además, quien tiene este tipo de piel siente que le falta hidratación a pesar de tomar agua suficiente. Tiende a ser áspera y se agrieta con facilidad. Los peores enemigos de este tipo de piel son el frío, el sol y el viento. Las mejores cremas son las ultra hidratantes con nutrientes intensivos y calmantes, como Vitamina E y Omega 3. La máxima hidratación le dejará a la piel una sensación de suavidad y flexibilidad. Además los componentes ayudarán a que las células retengan las sustancias hidratantes.
Piel normal o mixta
Este tipo de piel es la más equilibrada y resistente. Los poros son apenas visibles y el aspecto que tiene es suave y aterciopelado. Este tipo de piel es grasa en la zona de la nariz, el mentón y la frente. Las cremas idóneas son las hidratantes ligeras y sedosas. Ayudarán a mantener el equilibrio de la piel y aportan una sensación de frescura.
Piel grasa
Es la piel más gruesa y dura debido a que la actividad de las glándulas sebáceas es mayor. El tono es más apagado que el de los otros tipos de piel. Las cremas de rápida absorción son la mejor opción, pues evita que queden residuos grasosos en la piel. Los formatos de loción o gel son las más recomendables.
¿Qué crema es la más indicada para ti?