Los lunares son considerados sexys y son más atractivos cuando los tiene la mujer. Sin embargo, pasar mucho tiempo bajo el sol puede ser riesgoso. Si un lunar cambia es peligroso para tu salud. Existen algunas señales que ayudan a detectar cuando un lunar pasa de lo normal a algo extraño. Aprende un poco más para que sepas qué hacer en caso de que notes algo raro.
Lunares y protuberancias
Los lunares normales son manchas de color uniforme. Su tonalidad puede ser café, canela o negro. La forma puede ser plana, prominente, redonda u ovalada. El tamaño, por lo general, es menor a 6 milímetros. En la mayoría de los casos, las personas nacen con los lunares. Sin embargo, otros pueden salir en la niñez o juventud. Sin importar el caso, un lunar normal no cambia de tamaño ni color aunque pase el tiempo. Lo más importante es que observes que tus lunares no cambien, pues eso indica que es maligno.
Señales de que un lunar es maligno
Un lunar es maligno si presenta las siguientes señales:
- Es reciente. Como dijimos, los lunares aparecen en el nacimiento o la niñez. Pasando los 40 años, la aparición de un lunar puede significar que se trata de un melanoma.
- Cambio en los existentes. Es importante que conozcas tus lunares. Su forma, tamaño, grosor. Si un lunar que has tenido desde hace tiempo, cambia de repente, es una señal de que algo pasa. Para identificar los cambios más fácilmente, usa la regla del ABCDE. A) asimetría, B) bordes irregulares o desiguales, C) color, que se nota diferente o con manchas rozadas o blancas. D) diámetro de más de 6 milímetros, E) evolución, que sigue cambiando en todos los aspectos.
- Superficie. Si notas descamación, exudación o sangrado es señal de irregularidad y de que no es normal.
Ahora ya sabes, ante cualquier anomalía, lo mejor siempre será que acudas al médico, al dermatólogo conceretamente. No dejes pasar cualquier detalle.