La dermatitis seborreica es una condición común de la piel, que puede ser provocada por estrés, cambios de clima, ingredientes dentro de los productos de belleza o cambios de pH en la piel. Si bien es una condición bastante común, es una enfermedad crónica que requiere de cuidados específicos. Aprende un poco más acerca de ella y cómo puedes contrarrestarla.
No es grave pero es penosa
Esta condición dermatológica no es algo grave, pero sí puede resultar algo penosa. Aún no se sabe a ciencia cierta la causa de esta alteración; sin embargo, hay factores, como el estrés y la fatiga, que pueden desencadenarla. Es una afección crónica que puede empezar como una ronchita y extenderse hasta el cuero cabelludo, cara y cuerpo. De hecho, esta puede ser una causa subyacente de la caspa. Se caracteriza por la aparición de escamas de color blanco o amarillo.
Síntomas de la dermatitis seborreica
- Escamas blancas o amarillas. De aspecto grasoso y pegajoso.
- Lesiones en la piel, pequeñas grietas y lesiones inflamatorias.
- Placas que cubren una zona muy grande de la piel.
- Piel grasa.
- Comezón intensa.
- Enrojecimiento de la piel.
Cómo lidiar con ella
Ya que este problema dermatológico es crónico, solo se puede aminorar y prevenir usando productos dermatológicos. Lo ideal es recurrir al dermatólogo para determinar un plan de acción. Si te han aparecido algunas ronchas, lo mejor que puedes hacer es recurrir a productos hipoalergénicos. Dejar de lado las cremas, perfumes y jabones con colorantes y de los productos de belleza que pudieran desencadenar esta alteración. Los dermatólogos suelen recetar shampoos y cremas con un leve contenido de antimicótico para atacar la dermatitis seborreica. Por otra parte, es super importante que bajes tus niveles de estrés haciendo un poco de ejercicio.