Organizar tus productos de belleza te hará la vida más fácil

Seguro ya tienes idea de que para mantener la salud y belleza de tu piel, debes seguir una rutina de belleza. Los productos que se pueden usar para llevarla a cabo son muchos. Recuerda que debes elegir los que se adapten a tus necesidades. Para facilitar tu rutina conoce una serie de consejos con los que lograrás lo que te propones de manera eficaz.

Es necesario decir adiós

Así como en la vida, a veces es bueno decir adiós; lo mismo sucede con nuestros objetos. Muchas personas tendemos a guardar cosas incluso cuando no las necesitamos. Para que tus productos de belleza no se vuelvan un caos, solo quédate con lo necesario y a lo demás dile adiós.

Tu cabello

Al igual que con tu maquillaje, revisa todos los productos que tienes en el baño. No es recomendable que tengas más de dos pares de champú y acondicionador. Si tienes varios productos por más de cuatro meses, es hora de tirarlos. Solo puedes guardarlos un par de meses más si aún no los abres. También puede probar con tener uno o dos productos que te ayuden en varios aspectos. Por ejemplo, el champú seco ayuda como spray y dar volumen a tu melena.

No olvides tu piel

Los productos para cuidar tu piel dan indicio de lo que ya no funciona. Si notas que la textura, el color o el olor cambian, es necesario que te deshagas del producto. La compra más inteligente es elegir productos que cubran varias necesidades en uno solo. Busca crema hidratante antienvejecimiento, con SPF. Tu limpiador también puede tener exfoliante.

Cuida tu makeup

Para facilitar tu rutina lo primero es deshacerte de los productos que ya tienen contigo más de medio año. Revisa bien en tu cosmetiquera, tus cajones y el baño, pues seguro tienes varias cosas que ya pasaron al otro mundo. Si tienes duda sobre qué debes o no tirar checa: rímel luego de tres meses de uso; base o rubor, seis meses; productos en polvo, un año. Incluso los productos que tengas aún nuevos, tíralos si ya llevan ahí un buen rato. Es recomendable que para facilitar tu rutina de belleza, tengas a la mano lo que más usas. Por ejemplo, en la cosmetiquera guarda el rímel, tu labial, la base. Lo demás ponlo en un armario para no tener tanto caos en tu tocador.