Las fiestas de Halloween y Día de Muertos ya están aquí y debes pensar en tu disfraz. Aunque hay muchísimos estilos y tipos de disfraces, el makeup es uno de los mejores aliados; puedes darle un plus a tu disfraz o incluso no invertir en prendas y lucir fabulosa solamente con pintura en la cara. Aquí te vamos a dar dos opciones para maquillarte como calavera o catrina.
Maquillarte como catrina
Para este tipo de maquillaje necesitas un poquito más de experiencia, por los detalles. Sin embargo, el que te vamos a mostrar es relativamente sencillo de hacer, y más porque solamente hay que pintar la mitad del rostro. Comienza aplicando maquillaje blanco en la mitad de tu cara. Con un lápiz negro, dibuja un círculo alrededor de tu ojo y después traza una flor; colorea esta con una sombra de color llamativo. Pinta de negro los huecos que dejó la flor dentro del círculo y añade pequeños puntos alrededor para que le dé un plus a tu makeup. Con ayuda del lápiz negro, dibuja telarañas y flores en tu frente, mismas a las que les puedes dar color como lo hiciste en tu ojo. Repite esto también en tu barbilla. Dibuja la dentadura sobre el maquillaje blanco. Si lo deseas, pon pequeñas lentejuelas en los pétalos de la flor para darle un toque brillante. No olvides pintar de negro la mitad de tu nariz.
Maquillarte como calavera
Este maquillaje es super fácil de hacer, así que no tengas miedo de intentarlo. Con ayuda de una esponja, aplica maquillaje blanco por todo tu rostro, incluidos los labios y el cuello. Con un pincel aplica maquillaje negro al rededor de tus ojos; cubre muy bien hasta la ceja, los pómulos y donde inicia la sien. Después, con un lápiz negro (incluso puede ser el de tu delineador de ojos), marca la dentadura con líneas como se muestra en la imagen. Aplica un poco de maquillaje negro debajo de los pómulos, justo en la zona donde acostumbras poner el contour, y en toda la nariz. Si quieres darle un toque malvado a tu makeup, crea el efecto de sombra en los extremos de tu entrecejo; debe parecer que estás enojada. Listo, ¿a poco no es facilísimo?