Ser una mujer latina es simplemente una bendición. No por nada muchos extranjeros terminan casados con hermosas mujeres latinas. La realidad es que nuestra belleza va más allá de las curvas. De hecho, contamos con un sinfín de características que nos vuelven únicas.
Aquí están solo algunas de ellas.
Somos cálidas
No existen ni existirán mujeres más cálidas que las latinas. Lo somos hasta con los extraños que encontramos por la calle o las personas que nos atienden en los restaurantes. La amabilidad y calidez es una característica única de las mujeres latinas. Se ve hasta en la forma de saludar a las personas a nuestro alrededor. Es ese algo que nos convierte en mujeres fraternales, dispuestas a dar abrazos y besos a quien lo necesite.
Nos gusta reír
Cuando se trata de reír no hay quien nos pare. Las carcajadas están a la orden del día sin importar que tan estridentes puedan ser. Somos mujeres felices la mayor parte del tiempo. Eso se nota pues esa misma calidez de la que te hablaba está tanto en el interior como en el exterior.
Cuidamos de la familia
Si hay algo que nos caracteriza es la forma en la que amamos a nuestra familia. Hacemos de todo para consentirla, a pesar de que algunas no seamos buenas cocineras encontramos la forma. El amor de familia es una parte muy importante de las mujeres latinas. Cómo lo es el maravilloso trabajo de ser mamá.
Muy sexys
Coquetas, sonrientes, con curvas y por supuesto el veredicto siempre va a ser sexys. Somos una combinación bastante interesante, no importa de que parte vengas. Nuestros rasgos son únicos, atrevidos y desprenden esa sensualidad que nos vuelve mujeres hermosas. Tanto por dentro como por fuera.
Bailar, ¡no se diga más!
La música, la fiesta y el baile es parte de nuestra vida. La belleza de ser latina es que traemos el ritmo en la sangre. Hasta las mujeres a las que no les agrada tanto bailar están dispuestas a pararse e intentarlo. Difícilmente una latina resiste quedarse sentada ante una buena pista de baile.
Somos mujeres fuertes
Somos madres, mujeres, amigas, esposas, confidentes, guardamos mil secretos y muchas veces anteponemos el bienestar de las personas que amamos. Parte de la belleza de ser latina es que somos y siempre seremos mujeres fuertes. Dispuestas a hacer lo que sea para salir adelante y defender a los nuestros.
Hacemos de todo un poco
No solo somos mujeres de casa; de hecho, últimamente solemos ser bastante independientes. Mujeres fuertes en busca de un futuro diferente con la suficiente creatividad para hacer lo que sea.
Somos grandes mujeres
Finalmente no hay más que decir. Somos mujeres maravillosas. ¿Estas de acuerdo? La belleza de ser latina está en más que solo nuestras curvas.
