Estrías : ¿le salen a todas las mujeres?

Las estrías son una de las peores pesadillas para las mujeres y también para algunos hombres. Pueden ser de color blanco, moradas o carmesí. Son muy comunes las estrías en los senos, glúteos, vientre, muslos y brazos. Descubre las principales causas de su aparición.

Problema que no distingue edad

Tener estrías es un problema que surge a cualquier edad. Se debe a la ruptura de las fibras de colágeno, reticulina y elastina de la piel. Lo habitual es que sean de color rojo al principio y luego se vuelven blancas. Algunas veces la piel “rota”, toma una tonalidad morada.  Tal vez lo más molesto es cuando hay estrías en los senos. La ruptura se debe a que la piel se estira en exceso y pierde la elasticidad para recobrar su forma. Ocurre por estas causas.

Genética

Nuestros rasgos físicos se determinan por factores genéticos, al igual que la propensión a sufrir ciertas enfermedades o problemas estéticos. Las estrías no generan dolor, aunque sí existe la molestia de sentir prurito, ardor o quemazón en ciertas zonas. Si tu mamá o abuela tienen estrías, podrías ser candidata a tenerlas. Con los cuidados necesarios prevendrás su aparición.

Adolescencia

Las primeras estrías surgen a edad temprana debido a los desajustes hormonales. Cambios asociados al crecimiento y variaciones metabólicas. Es importante recalcar que las primeras estrías aparecen en la zona de los glúteos. Si existen cambios en el peso, aparecerán estrías en los senos y abdomen.

Aumento de peso

Cuando aumentas de peso, tu cuerpo tiene que hacer ajustes. Permite que tu piel se estire para soportar el exceso de volumen. La piel se “rompe” y las fibras se separan formando las temidas estrías. Principalmente hay estrías en los senos, glúteos y abdomen. Sin embargo, no sólo el aumento de peso las causa. Incluso aparecerán si pierdes mucho peso de manera drástica.

Embarazo

Durante el embarazo, las zonas más propensas a tener estrías son los senos y el abdomen. Por eso se recomienda hidratar la piel con frecuencia para prevenir su aparición. Al crecer el vientre, se produce una extensión más pronunciada y las fibras de la piel tienen más riesgo de perder la elasticidad.

Alimentación deficiente

No seguir una dieta balanceada puede ser la causante de las estrías. Al no darle los nutrientes necesarios a tu cuerpo, la elasticidad de tu piel disminuye. La hidratación también es importante, pues así tu piel se mantiene elástica y tiene menos probabilidades de romperse.

Usar bloqueador solar así como hidratar y nutrir la epidermis ayudará a prevenir las estrías. Además, mantener un peso constante y seguir una dieta variada que proporcione antioxidantes a tu cuerpo es otro paso. Mantenerte hidratada ayudará a optimizar tu metabolismo, lo cual también ayuda.