Esta receta es perfecta si estás buscando una opción natural, si te has dado cuenta de que ningún enjuague del mercado te sirve o si te molesta la sensación de ardor que te produce tu enjuague.
La halitosis, o mal aliento, es un problema común a medida de que vamos creciendo. Muchas veces refleja un problema de salud subyacente, como una afección intestinal o estomacal, mala higiene bucal, mala alimentación, y problemas en el hígado o riñones. Un buen enjuague bucal nos ayudará a eliminar este problema. Para que dé resultado, debe usarse una o dos veces al día después de haber lavado tus dientes. Si sufres de mal aliento al despertar, lo mejor es que lo hagas en la mañana y en la noche.
Un enjuague bucal casero dura hasta 2 semanas en el refrigerador, pasado ese lapso tendremos que tirarlo y volver a preparar más. Sin embargo, sus ingredientes son muy fáciles de conseguir y, sobre todo, baratos. Es una gran idea para ahorrar un poco de dinero en limpieza bucal y funciona de maravilla.
Ingredientes:
- 2 cucharadas de hojas menta fresca
- 2 cucharadas de hojas de hierbabuena fresca
- 2 cucharadas de romero
- 2 cucharadas de perejil
- 3 cucharadas de bicarbonato de sodio
- 100 ml de agua
Todas las plantas usadas en este enjuague ayudan al mal aliento y el bicarbonato contribuye a eliminar las bacterias que puedan existir en tu boca.
También existen algunas otras pautas que puedes considerar para mejorar tu aliento como:
- Beber agua confrecuencia.
- Lavar tus dientes 3 veces al día.
- Si se te olvidó tu cepillo de dientes, mastica un chicle sin azúcar.
- El apio es un gran aliado para combatir el mal aliento, inclúyelo en tus comidas.
Preparación:
- Es importante lavar muy bien todas las hojas antes de hervirlas, para eliminar la tierra que pueden tener.
- Pon el agua a hervir en una cacerola.
- En cuanto esté en punto de ebullición, agrega las hojas.
- Espera a que se entibie y viértelo en un recipiente que puedas meter al refrigerador.
- Cada vez que vayas a usarlo, sirve un poco en un vaso aparte y agrégale una o dos cucharadas de bicarbonato de sodio.
- Haz buches con la mezcla durante 20 segundos aproximadamente, y escupe.
- Nunca debes ingerir el enjuague bucal.
Si crees que aún no se te quita, puedes duplicar las porciones de los ingredientes para que la mezcla se haga más fuerte y concentrada.