Todas sabemos lo que una noche de desvelo le puede hacer a nuestra piel. Las temidas bolsas de los ojos empiezan a aparecer después de una mala noche. Sin embargo, lo que no muchas sabemos es cómo podemos deshacernos de ellas.
¿Cómo se forman las ojeras bajo los ojos?
Genética, descanso y alimentación tienen todo que ver con la aparición de estas molestas bolsitas.
Empecemos por explicar que la piel del contorno de nuestros ojos es cinco veces más delgada que la del resto de nuestro rostro, la cual ya es bastante más fina que la del cuerpo. Alrededor de los ojos existen 22 músculos periorbitales en continuo movimiento, esto provoca que la piel se distienda con mayor facilidad.
Por el lado genético
Gen Technik 7
Algunos tonos de piel son mucho más propensos a oscurecerse con el tiempo. Esto es simple cuestión de genética. Si tus padres tienen unas ojeras oscuras, lo más probable es que tú heredes esta característica. Es parte de la programación de tu cuerpo. Contra eso no podemos hace mucho, es mejor consultar a un dermatólogo para ver cuáles son las opciones.
Por un desvelo o mala alimentación
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Ambas situaciones llevan un proceso muy parecido. Cuando no tenemos la correcta cantidad de nutrientes para que nuestro cuerpo funcione de manera adecuada, se produce inflamación, que aumenta cuando pasamos la noche en vela. Esta inflamación es una retención de líquido intersticial, que al no poder drenarse, se convierte en una pequeña bolsita en nuestro párpado inferior.
Esta condición empeora cuando existe una pérdida de tono muscular. O bien, por la falta hierro, ya que su deficiencia resulta en una pobre oxigenación, lo que contribuye a la creación de coágulos en los vasos sanguíneos de alrededor de los ojos.
¿Cómo nos deshacemos de las bolsitas?
- Cuando se trata de una retención de líquidos, podemos recurrir a la gimnasia facial para descongestionar la zona afectada. Sólo debes apoyar los dedos en los ojos, cerrar y abrir los ojos con fuerza durante unos diez segundos por cada ojo. Al terminar, debes cerrar ambos ojos relajándolos por 10 segundos.
- Siempre duerme boca arriba con almohada, ya que dormir con el rostro en contacto con ésta, entorpece la circulación de esta zona.
- Hielos, tan simple como reducir la hinchazón de tus ojos con un poco de de frío; la baja temperatura reduce la inflamación de los vasos sanguíneos.
- Mascarilla de pepino, si tienes un pepino en el refrigerador, este podría ser tu salvación en casos de emergencias. Solo tiene efecto temporal; sin embargo, si lo haces frecuentemente podrás disfrutar de los beneficios a largo plazo.
