Tu piel durante el embarazo puede sufrir distintas alteraciones, como resequedad, várices, estrías, debido a los cambios físicos y hormonales que tu cuerpo está experimentando.
Sin embargo, no hay de qué preocuparte, existen algunos remedios que puedes usar para cuidar tu piel durante el embarazo.
Tu piel durante el embarazo
Tu cuerpo está programado para soportar los cambios durante el embarazo. La piel es un tejido flexible; sin embargo, se enfrentará a un estiramiento muy grande, con las alteraciones hormonales propias de este estado. La epidermis es uno de los órgano del cuerpo que se verá más afectado por el embarazo.
En esta etapa tu piel se vuelve más sensible, es propensa al enrojecimiento y a las alergias. Es algo completamente normal que empieces a reaccionar ante productos de uso cotidiano. Desodorantes, perfumes y cosméticos, por ejemplo, podrían causarte reacción. En algunos casos, si tenías una patología previa, puede verse alterada por tu condición.
La solución a este problema será tener cuidado con los cosméticos que te apliques. Una opción podría ser cambiarlos los productos habituales por productos hipoalergénicos que evitarán cualquier tipo de reacción.
Las estrías
Ya hemos hablado antes de cómo se producen las estrías, tanto en la vida cotidiana cómo en el embarazo. Son esas pequeñas fisuras de color rojo que al pasar del tiempo cambiaran su color y se volverán blancas.
Lo malo de este problema es que si no actuamos a tiempo para prevenirlas, muy pocas mujeres se salvan de tenerlas. Afectan al 90 % de las embarazadas y aparecen a partir de la semana 25 en el busto, abdomen y pompis.
La solución al problema es que mantengas tu piel hidratada. Es de vital importancia que le untes crema hidratante, además de una crema antiestrías día y noche. Aunque ya te hayan salido es necesario que sigas hidratando la zona, de esta forma la textura de la piel mejorará.
Para eliminarlas por completo existen tratamientos cómo la cirugía y el láser. Sin embargo, es necesario esperar a que acabe la lactancia para usarlos.
La hiperpigmentación
Es el oscurecimiento de la piel, aparece en las areolas mamarias o desde el ombligo hasta el pubis. Esto se debe al desequilibrio hormonal que está experimentado tu cuerpo. No te preocupes, pasará una vez terminado el embarazo.
Otro tipo de hiperpigmentación se da en el rostro, se le llama melasma o cloasma. Aparecen manchas oscuras en la frente, nariz y mejillas y suele atacar a 50% de las embarazadas. Se produce por un aumento de estrógenos que, a su vez, ocasiona un aumento en la melanina, sustancia que pigmenta tu piel.
Cómo prevenir y ayudar: El sol empeora las manchas. Por lo tanto, aplicarse protector solar aantes de salir es superimportante. Recuerda que si bien la piel puede verse antiestética debido a las manchas, por lo regular desaparecen al acabar la gestación.
En el caso de que no ocurra, es preciso esperar a que acabe la lactancia para someternos a tratamientos de despigmentación.
Pica la piel
Esto es parte del estiramiento al que se somete la piel en esta etapa de tu vida, se reseca e irrita con facilidad y eso genera el picor.
Desaparece el picor hidratando tu piel con las cremas adecuadas y tomando la cantidad ideal de agua. Recuerda que es de vital importancia que te hidrates también por dentro. ¿Cuáles son lo cuidados que le das a tu piel en esta etapa?