Crio-facial, ¿qué beneficios le ofrece a tu rostro?

El crio-facial tiene sus orígenes en la crioterapia, una técnica que fue empleada con mucho éxito para curar lesiones. Consiste en la aplicación de nitrógeno frío, en periodos cortos, sobre la piel. La temperatura que alcanza oscila entre los -110 y -160 °C. Los beneficios de la crioterapia en el cuerpo son múltiples. Los más conocidos a nivel general son el alivio de dolores corporales crónicos y una mejor circulación. Ahora te invito a conocer lo que esta terapia hace por tu cutis.

Más efectivo que cualquier mascarilla

El crio-facial es un tratamiento no invasivo que ayuda a eliminar las toxinas del tejido blando mediante la aplicación de bajas temperaturas. Lo anterior permite recuperar la elasticidad natural de la piel del rostro. Es decir, elimina la flacidez y los problemas de los células internas de la epidermis. Al estimular las capas profundas de la piel, ninguna mascarilla se le compara. 

Recupera el colágeno de tu rostro

Debido a la aplicación de bajas temperaturas sobre la tez, el cuerpo reacciona de manera positiva estimulando, de manera natural, la producción de colágeno. Lo anterior se traduce en una piel con aspecto más joven. Olvídate de las arrugas y las manchas en tu rostro. 

Reduce la inflamación de tu cara

El nitrógeno frío aplicado sobre el rostro durante cinco minutos, propicia una mejora en la circulación de los vasos sanguíneos de la cara, provocando que los tejidos de la zona se contraigan. Esto contribuye a disminuir la inflamación facial en el contorno de los ojos (lo que coloquialmente conocemos como bolsas), la nariz y los pómulos. Además, es un fabuloso auxiliar en el tratamiento de padecimientos cutáneos como la psoriasis y el eczema, siempre bajo supervisión médica.

Si deseas probar los beneficios de la crio-facial, recuerda que es importante acudir con un profesional. Te encantarán los resultados.