Beber suficiente agua es esencial para el funcionamiento de nuestro organismo y para mantener nuestra piel hidratada y bella. A veces se nos olvida o simplemente tomamos “lo necesario”, pero nuestro cuerpo necesita más que eso. Una mujer debe beber 2.2 litros de agua al día para mantener lubricadas sus articulaciones, proteger el cerebro y otro tejidos, regular la temperatura del cuerpo, y la lista sigue. En conclusión, tomar agua es primordial si queremos mantener nuestro cuerpo joven y saludable
¿Estás tomando suficiente agua?
Es posible que no seamos conscientes de cuánta agua estamos bebiendo al día o quizá pensamos que nuestro cuerpo no nos pide tales cantidades de líquidos, pero tu organismo te envía ciertas señales cuando no está lo suficientemente hidratado.
Cuando estás deshidratada tu boca se siente seca, puedes experimentar presión sanguínea baja y dolores de cabeza. Otros síntomas son mareo, piel seca y fatiga. Por otro lado, si tu orina es color amarillo claro o incluso transparente, ¡genial!: estás tomando el agua que necesitas. Si por el contrario, es color ámbar, significa que no estás tomando suficiente.
¿Te suenan familiares los síntomas anteriores? ¡A tomar cartas en el asunto! Hay algunos trucos que puedes poner en práctica que te ayudarán a beber más agua y mantenerte hidratada. ¡Toma nota, tu cuerpo te lo agradecerá!
Truco 1: intégrala a tu rutina
Si tienes rutinas establecidas en la mañana y para ir a dormir, es fácil que integres a ellas la ingesta de agua. ¿Cómo? Deja un vaso de agua en tu mesa de noche para beberlo justo después de despertar. Acostúmbrate a beber un vaso de agua antes de tu café. Lo mismo aplica para la hora de ir a dormir, bebe un vaso de agua antes de lavarte la cara o mientras te preparas para ir a dormir. Si te cuesta trabajo acordarte intenta dejar los vasos visibles para que sean un constante recordatorio de beber agua.
Truco 2: marca una botella
Cuando cargas con una botella de agua es más fácil beber a lo largo del día. Marca con un plumón las metas a las que quieres llegar mientras transcurre el día. Super buena idea y fácil de hacer ¿no? También te recomiendo que consigas una botella que en serio te guste. Si terminas con la de tu hermanito seguro se te “olvidará” a cada rato o te dará pena sacarla en el trabajo. Una botella de tu color favorito o de diseño agradable no se te olvidará cargarla a todos lados ¡y te ayudará a beber más agua!
Truco 3: ponte alarmas y crea disparadores mentales
Si aun así olvida por completo tomar agua, ponte alarmas en tu teléfono. Activa algunas alarmas en tu celular para que suenen a lo largo del día y cuando suenen ¡a tomar un vaso enorme de agua! De hecho, existen apps enfocadas a este propósito. Es importante que bebas agua sin la ayuda de alarmas. Otro disparador mental puede ser que cuando empieces a tener hambre, tomes un vaso de agua. Muchas veces la sensación que interpretamos como hambre se puede tratar simplemente de sed. También puedes beber un vaso de agua después de ir al baño o tomar un trago cada vez que tomas un receso en el trabajo. Con el tiempo, beberás agua en esos momentos sin siquiera pensarlo; es una forma de crear un hábito.
Truco 4: dale sabor a tu experiencia
Te puedes sentir más motivada a tomar agua si la haces un poco más interesante. Agregar fruta o pepino le da un poco de sabor sin añadir azúcar de la fruta en jugo. También puedes hacer hielos con rebanadas de limón, es muy fácil y harás tu bebida más interesante. Otra manera es darle sabor con hierbas como romero, hierbabuena, albahaca, etc. Lávalas bien y agrégalas a una jarra de agua, déjala en el refri por unas horas y ¡disfruta! Si te gusta el refresco, bebe agua mineral, tendrás esa sensación burbujeante sin el azúcar y los demás añadidos.
Mantenerte hidratada cambiará la vida. Cuando estás bien hidratada mejora tu digestión, piensas con mayor claridad y duermes mejor. ¡Además no olvides los beneficios para tu piel!
