Hay enfermedades que provocan cambios en el cuerpo tanto por dentro como por fuera. El cáncer es una de ellas, y en muchos casos se requiere un tratamiento de quimioterapia para ayudar a las personas a sentirse mejor. Si la terapia resulta exitosa, logra eliminar el problema. Sin embargo, el problema reside en que el aspecto físico de la persona enferma se ve afectado por todos los químicos que recibe el organismo.
Función de la quimioterapia
La quimioterapia actúa sobre los tejidos para lograr la eliminación de tumores. Al no ser selectiva y combatir todos los tejidos de proliferación rápida, también afecta a los folículos capilares. Es decir, este tratamiento ataca también a las células sanas y puede llegar a eliminarlas. Las células del folículo desaparecen y esto genera alopecia. Sin embargo, dependerá de las dosis empleadas y los medicamentos utilizados que el cabello se caiga o solo se debilite. Cualesquiera que sean las características del paciente, se afecta el cuero cabelludo y el vello del cuerpo, por lo que puede perderse de manera parcial o total.
El tratamiento de quimioterapia y los efectos en tu cabello
La pérdida del cabello puede ser gradual o en mechones. Suele ocurrir entre 7 y 10 días después de que ha comenzado el tratamiento de quimioterapia. Para que el cabello no se dañe tanto, es importante tener ciertos cuidados.
- Es mejor usar un champú suave, como el de bebé.
- Evitar lavar el cabello todos los días para no debilitarlo más.
- Secar el cabello de manera suave para no quebrarlo.
- Cepillarlo con mucho cuidado y de preferencia con un cepillo de cerdas suaves.
- Suspender los tratamientos químicos como el tinte y los permanentes, así como el planchado de cabello y el uso de la secadora.
- Proteger del sol o calor excesivo, así como del frío.
- Usar una crema hidratante para el cabello.
Después del tratamiento…
Luego de la quimioterapia, el cabello vuelve a crecer debido a que las células del folículo retoman su ciclo y se regeneran. Dar masajes en el cuero cabelludo ayudará a eliminar las escamas y la piel reseca. Es mejor esperar un año antes de someterte a algún tratamiento químico como permanente o alisado.