Seguro has conocido a más de una persona que cuando sonríe, se le forman unos lindos hoyuelos en las mejillas. Mucha gente queda encantada, pero pocos saben cuál es su origen. En la actualidad, muchos chicos han decidido recurrir a la dimpleplastia para lucir esos cotizados hoyuelos.
En qué consiste la dimpleplastia
Es una operación quirúrgica mediante la cual se forman hoyuelos y no necesita anestesia general, solo local. Las personas que recurren a esta cirugía buscan darle un nuevo aire a su rostro. Saben que al sonreír se verán diferentes y sin duda llamarán la atención. Lo curioso es que mucha gente no sabe que estos hoyuelos son un defecto congénito. Por eso sólo algunas personas los tienen de nacimiento. Los hoyuelos son el resultado de una brecha entre el músculo cigomático mayor, que se sitúa a ambos lados de la cara. Como resultado, sólo aparece cuando los músculos faciales son más cortos.
Hoyuelos en las mejillas
Dejando de lado el hecho de que sean o no un defecto genético, muchas personas los consideran un ideal de belleza. A inicios del siglo XX, las personas relacionaban los hoyuelos con la delgadez. Se crearon diversos aparatos que tenían una función que ofrecía resultados parecidos a los de la cirugía. En la actualidad, la dimpleplastia es un procedimiento que tarda, por mucho, una hora. ¿Cómo se hace? El médico realiza una incisión dentro de la boca del paciente. Adhieren el músculo a la superficie interior para que los hoyuelos se marquen. Al finalizar la cirugía, queda hinchazón y dolor, por lo que en un principio tal vez no se aprecien de manera adecuada.
Piensa si realmente vale la pena que te operes diferentes partes de tu cuerpo para caerle bien a los demás. Lo más importante es que te ames y aceptes como eres.
