Las canas no deberían ser motivo de depresión ni de reacción negativa hacia nuestra imagen. Al contrario, se lleva como las cicatrices que hemos acogido a lo largo de nuestra vida. No quiero decir que no puedas cubrirlas, cada mujer conoce la mejor forma de verse guapa. Lo cierto es que en algún punto aceptar el paso del tiempo te será de gran ayuda. Empieza ya y acepta tus canas
El recuerdo
Acepta tus canas. Detrás de cada uno de esos cabellos blancos hay una historia increíble que contar. Quizás han empezado a llegar a edad temprana, quizás no. Lo grandiosos de crecer es que siempre tendrás la posibilidad de mirar atrás para atraer esas historias por las que vale la pena vivir. Una cana por esos días cuando las responsabilidades no existían del todo y eras la persona más feliz del mundo viviendo en un mundo imaginario.
Una gran juventud
Por el tiempo en que viviste intensamente todos los días al límite. Atesora ese tiempo maravilloso cuando los problemas se creían diminutos y la única forma de avanzar era mirar hacia adelante con los sueños que invadían tu cabeza. A veces, al crecer olvidamos lo importante que es disfrutar de la vida. Atesora esas canas que han sido fruto de una vida maravillosa. Y si aún no sientes que la hayas tenido, lucha. Enfrenta todo porque vivir vale la pena, tener una vida que recordar dentro de unos años más vale la pena.
Un sueño
Una mujer que ha vivido es aún más hermosa que la más joven, pues consigo trae las letras de una historia nada fácil. Ser mujer y aceptar tus canas no es nada fácil. Nos han enseñado a ser duras, fuertes, mujeres que siguen adelante sin importar la situación. La verdad es que no importa qué edad tengas ni qué tan alto llegues, siempre puedes caer o subir más alto. Acepta tus canas pues reflejan esas experiencias que tienes hoy y no son en balde. Los años, arrugas, incluso cicatrices nos hacen ser quienes somos el día de hoy. Nunca las hagas a un lado.
Vive
La vida no es nada fácil, cada una conoce la realidad que ha tenido que pasar. Sabe los sacrificios y problemáticas que han surgido a lo largo del tiempo. A pesar de todo, sé consciente de que ha valido la pena, pues te ha hecho quien eres. Agradece todos los días por la vida que tienes, las experiencias que has tenido y la forma en la que vives.
La decisión de ser feliz está en tus manos. Eres responsable del destino que forjas día con día. No te rindas.