7 trucos infalibles para aplicar tu blush como una experta

Muchas chicas no utilizan blush porque no entienden la importancia que tiene este producto en su makeup. En este sentido tu blush te ayuda  a atenuar el efecto de cara recién lavada. También hace que el rostro se vea más saludable, sonrosado y un poco bronceado. No obstante, si lo aplicas mal, puede verse fatal. Por eso te doy 7 trucos para que te apliques tu blush y te veas como una diva.

Utiliza un labial mate

A veces es difícil encontrar un buen blush, otras, tienen un precio muy alto. Por tanto, necesitas utilizar otro producto para cumplir con esa función. Uno de los mejores que puedes utilizar es un labial mate, este se deslizará suavemente sobre tu rostro. Además, no se correrá sobre tu rostro por nada del mundo. Uno de los colores que te favorecerán muchísimo es el mauve o palo de rosa.

Construye poco a poco

Lo peor que puedes hacer es aplicarte tu blush de forma pesada y tosca. Es decir, aplicar mucho pigmento con tus dedos. Lo mejor que puedes hacer es conseguir uno que tenga poco pigmento e irlo aplicando de forma gradual. De esa manera puedes obtener el color y el efecto deseado sin pasarte. Es mejor así, que tener que restar color, esto es más complicado.

Aplícalo con una brocha gorda

Lo mejor que puedes hacer es aplicarlo con una brocha ancha de cerdas muy suaves. Esta reparte el pigmento de forma uniforme, pero suave. De esa forma no luce muy marcado sino natural. En este sentido si utilizas una brocha pequeña y de cerdas muy juntas, obtendrás una línea rosa en tu mejilla y créeme que no quieres eso.

En cuanto a tu rubor, menos es más

Chicas, el blush debe ser un toque delicado de color que le da vida al rostro. Para nada debe ser una mancha rosa, roja o naranja en tu cara. Si lo haces así, sólo te verás muy exagerada. Mejor apuesta por lo natural y utiliza poco producto y pigmentos tenues que le vayan bien a tu color de piel.

Sonríe al esparcirlo

Si no sabes en qué parte del rostro debes aplicarlo, hay un truco muy sencillo que puedes hacer. Solo tienes que sonreír y justo en donde se forman las manzanitas, aplica un poco de blush. Recuerda que debe ser poquito.

Aplícalo después del iluminador y contour

Primero realiza el contouring en tu cara para hacer más dramáticas las facciones. Después, aplica iluminador para resaltar tus rasgos altos. Por último pon tu blush para armonizar todo lo anterior. Así de simple es el orden y no debes cambiarlo por nada.

Que vaya con tu tono de piel

Finalmente, cuida que el blush vaya con tu tono de piel. No importa qué tan bonito sea un tono si no va contigo, te verás mal. Por ello procura elegirlo con paciencia y cuidado.