El vínculo inquebrantable entre una mujer y su bebé.

El vínculo entre una y su hijo inicia desde su gestación, una vez que el feto comienza a crecer dentro de una mujer el lazo que se tiene es algo más que psicológico, es un lazo a nivel emocional proporcionado por el cerebro, la relación más cercana que podemos experimentar en nuestras vidas.

Este vínculo ayuda a los bebés en el inicio de una vida social por así decirlo, el primer contacto que se tiene con la madre fuera del vientre es muy importante ya que ayuda a ver qué tan apegada se siente hacia su bebé. Las caricias, sonrisas y abrazos nos dejan en claro cuando una madre ha logrado estar más cerca sentimentalmente de su bebé.shutterstock_98870129

El vínculo dentro del vientre no sólo es emocional, sino también algo físico. Se ha comprobado que el feto envía a su madre a partir del 5to mes de embarazo una señal que ayuda a la madre en la formación de un neurotransmisor llamado oxitocina, misma hormona responsable del placer y la confianza, esto ayuda a que el embarazo sea menos estresante. Aparte que se ha comprobado que durante el mismo se desactiva la hormona del cortisol, que es la hormona que se libera cuando estamos estresadas.

El pequeño también deja un regalo dentro de nosotras, cuando nos embarazamos, dentro de nuestra médula ósea se producen células madre que conservaremos toda la vida, éstas han sido encontradas en la reparación espontánea de fallo cardíaco o hepático dentro de las madres.  shutterstock_198608309

El lazo psicológico del bebé con su madre fue una preocupación generada en la década de los 40 y 60, donde los primeros en analizarla se dieron cuenta que los niños que crean un vínculo con su madre en los primeros días de vida y se ven beneficiados con los cuidados maternales, llegarán a ser jóvenes con mejores relaciones afectivas. En cambio los bebés abandonados en orfanatos presentaron un periodo de exigencia de atención, después de esto, se vuelven taciturnos y terminaban dejando de comer, incluso algunos llegaban a morir por lo mismo, el afecto es algo que determina si el bebé quiere o no seguir viviendo, de ahí la importancia de el primer lazo que se crea en su nueva vida.shutterstock_33963499

Lo actos como mecerlo abrazarlo, tocarlo y besarlo como muchos otros estímulos más son determinantes fomentan en el cerebro respuestas que afectan el resto de su vida emocional.