Por más que seamos unas amantes del amor, lo tenemos que admitir: las relaciones a distancia NO funcionan PUNTO.
- El contacto físico es mínimo.
El contacto físico es vital para una relación; no sólo me refiero al contacto sexual, sino ese contacto diario como el tomar la mano de la persona que amas, abrazarla cuando se te antoje, el tocar tocar su cabello y sentir su piel. O el simple hecho de tener a esa persona que te encanta cerca para oler su perfume. Esta posibilidad se minimiza en una relación a distancia. ¡SORRY! - Se pierden momentos importantes.
Imagínate, ¡todos los días de nuestras vidas pasa algo nuevo! Cuando estás en una relación de larga distancia es difícil compartir de momentos importantes, se vuelve complicado por cuestiones de tiempos. - Las fotos en tu teléfono se vuelven tu único canal para ver la carita de esa persona especial.
¡Confiésalo! Seguramente por lo menos unas 100 veces al día tienes que acudir a tu teléfono para ver la foto de esa persona amada y recordarte con quién andas. - Eres la “tercera” en las citas de tus amigas con sus novios.
¡¡Un escenario horrible!! Tus amigas salen con sus novios a cenar y, claro, te invitan y claro, aceptas ya que tu opción sería quedarte con tu pareja en una cita por Skype pero después de 5 meses ya no es tan divertido como antes. - No puedes VIVIR sin tu laptop o smartphone.
UUFF la peor de las pesadillas es que tu laptop o smartphone muera si estás en una relación de larga distancia! Estás en graves problemas, ¡tu mundo se acaba! - Vives en una realidad alterna.
Tu amor nunca está ahí (PRESENTE) pero si está en tu (MENTE). Es ahí mismo donde vives tu romance, viviendo de los recuerdos que te dejo en su visita, esos recuerdos se convierten en tu realidad, que solamente tú entiendes, y sonríes como loca, nadie entiende tus sonrisas repentinas. - ¡No funcionan y son costosas!
Las parejas a larga distancia gastan más que las parejas que viven a corta distancia. Entre viajes, hoteles, comidas, los gastos se pueden ir por los cielos!! Tal vez pienses: “vale la pena por unos segundos de felicidad!” ¡¡Bien por ti!!
