Inalcanzable?
La búsqueda inalcanzable del amor perfecto, así es como muchas mujeres buscan el amor el día de hoy. Los ideales que marcan que un hombre perfecto suele ser aquel que tiene ciertas características que las mujeres tienen tatuadas dentro de sus ilusiones, debe ser guapo, alto, fuerte, caballeroso, romántico, detallista… así podría seguir hasta aquellas que ya han hecho esta lista enfermamente específica: no doctores, sin pecas, sin lentes…
Desde muy pequeñas nos enseñan que en algún momento el príncipe azul aparecerá. Cuando comenzamos nuestra adolescencia y las hormonas están en plena locura, las películas románticas, estrellas del pop o de tv dictarán la pauta para elegir a un ideal, hasta el día que encontramos el primer amor y el descenso emocional al ver que lo que anhelamos sólo dura los primeros días o meses del enamoramiento, dejando a lo que son los hombres en realidad: seres humanos con defectos y virtudes, un humano igual que tú y yo.
El problema no está realmente en que este hombre tenga o no algunos defectos, si no que la mayor parte del tiempo nos desilusionamos y no aceptamos que, al igual que nosotras, ellos tampoco son perfectos.
Los hombres buenos existen. Deben ser caballerosos, educados, amorosos, pero a veces van a ser sucios, desordenados, impacientes, etc. es parte de tener una relación amorosa y si intentas evitar conocer a un hombre en circunstancias reales puede ser que nunca encuentres uno que cumpla con tus expectativas. Cuando veas los pequeños defectos de tu pareja amorosa (llámese: le gusta comer con las manos, ve caricaturas, sube los pies al asiento, etc.), habrás entrado a una relación real en la cual vas a tener que decidir si puedes lidiar con todos sus defectos al igual que él con los tuyos. Después de esto, estarás en medio de una verdadera relación amorosa con un hombre que puede ser el perfecto para ti.
El hombre perfecto existe, es diferente para cada mujer tiene sus defectos y virtudes, no te dejes envolver por un ideal inalcanzable. Conoce a tu pareja, el amor más dulce, verdadero es el que se conoce y se acepta por las dos partes por igual.