Todas hemos experimentado el queefing o ventosidades vaginales, pero poco sabemos de su origen o finalidad. Es normal que en tu mente tengas varias dudas e ideas de lo que eso significa. Si quieres informarte un poco más sigue leyendo, así podrás explicarle a tus amigas algo que todas queremos saber.
Ventosidades vaginales
Es un fenómeno que incomoda a muchas, pero que casi ninguna de nosotras conoce a fondo. El queefing es más común de lo que crees, y sí, todas lo hemos experimentado. Las ventosidades vaginales ocurren cuando entra aire en la vagina y necesita salir de ahí. Tal vez te preguntes cómo es que llega a un lugar tan profundo. Cuando te excitas, tu vagina se expande haciendo que entre más aire de lo habitual. Ese aire en algún momento necesita salir de ahí, pues no es el sitio en el que debería estar. Al salir, las sensaciones físicas son interesantes, además del ruido que parece un gas.
¿Verdad que sí has experimentado el queefing?
Ahora que ya tienes una idea clara en tu mente acerca del queefing, hay algo más que debes saber. Estas ventosidades no desprenden ningún olor. Son completamente diferentes de las flatulencias traseras, que se relacionan con el aparato digestivo y su origen es bacteriano. La primera vez que sucede puede causarte un poco de pena, pero después será algo divertido en tu vida. Piensa que tu vagina no es un lugar en el que pueda quedarse el aire por mucho tiempo.
Causas
A veces pensamos que el queefing ocurre solo durante el acto sexual, pero no es así. También puede suceder cuando haces ejercicio o vas al baño. Ten en cuenta que si las ventosidades ocurren frecuentemente, podría ser por hipotonía vaginal. Esto significa que el tono muscular de las paredes vaginales ha disminuido. Si te preocupa, realiza ejercicios de Kegel, los cuales ayudan a fortalecer el piso pélvico.
Como ves, el queefing es más común de lo que creías. ¡Que ya no te dé pena!