Niños que han contado cosas que han pasado en otras vidas

Estos días son días en los que tendemos a escuchar más cosas escalofriantes. Muchas veces las contamos por diversión, por pasar un rato ameno o simplemente porque la época lo amerita. Sin embargo, muchas personas lo viven día a día y a la larga puede ser bastante perturbador. Imagina qué pasaría si un día tu pequeño te dijera cosas que te dejan la piel chinita. Quiero contarte algunas de las historias que consideramos más espeluznantes. ¿Estás lista?

“Las calderas están mal. Yo estaba ahí, por eso no me gusta el agua ahora”

Un niño miraba con sus padres la famosísima película “Titanic”. Pasaba la película con sorpresa y tristeza por lo que se sabía iba a pasar. Cuando comenzaron a pasar las escenas en las que el barco comienza a inundarse, el pequeño sin más dijo: “las calderas están mal. No estaban de ese lado. Justo ahí donde se ven, estaba yo y por eso no pude salir. Ahora entienden por qué no me gusta el agua”. Toda su familia volteó a verlo sorprendida. No sabían qué decir.

“No puedo matarlo, es mi único padre”

Durante varias noches, Leonel y Amaia oían que su hijo pequeño reía y decía palabras “sin sentido”. <Agua, hola, que gracioso>, eran algunas de las cosas que escuchaban. Pensaban que estaba pensando en algo, recordando algún programa o que su imaginación volaba. Una noche, Leonel pasaba por la sala, cuando escuchó que su hijo susurró: “no puedo matarlo, es mi único padre”. A él sólo se le erizó la piel.

“Ese hombre todas las noches intenta entrar por mi ventana”

El pequeño Carlos, lloraba varias noches de manera consecutiva. Él gritaba y corría al cuarto de sus padres. Ellos sólo se encargaban de recibirlo, abrazarlo y apapacharlo para que se calmara. Una noche, el pequeño entró desesperado al cuarto y su madre le preguntó qué pasaba. Él sólo dijo “es que el hombre sin un ojo quiere entrar todas las noches por mi ventana”. Sin duda, una de las cosas escalofriantes que cualquier padre desea no oír.

“Toda la noche me pellizcó los dedos de los pies”

Joaquín era mi padre, quien falleció ocho años antes de que yo me convirtiera en mamá. Tuve una hija, y un día, luego de 4 años, ella despertó muy molesta. Se quejaba de que Yuyu no la había dejado dormir toda la noche. Cuando dijo eso, quedé petrificada, pues al único Yuyu que yo conocía era mi padre. Ella aseguraba que él le había estado pellizcando los dedos de los pies toda la noche y por eso no había podido dormir. Lo más curioso es que Yuyu así nos despertaba a mi hermana y a mí.

“Adiós papá”

Un hombre acostumbraba ir a darle el beso de buenas noches a su pequeño. Una noche, él niño le dijo: “adiós papá”. El papá le dijo: “no se dice adiós, se dice, hasta mañana”. El niño dijo “no papá, se dice adiós porque ya no nos volveremos a ver”.

“Mi hermano está ahí”

Camila paseaba con su hija, pero para llegar a donde iban, tenían que pasar junto al panteón. Eso no era impedimento para ellas, o al menos eso pensaba Camila. Cuando iban pasando por la puerta del panteón, su pequeña hija le dijo: “ahí es donde está mi hermanito”. Camila se quedó helada, pues no tenía más hijos. Entonces le preguntó a su hija por qué decía eso. La niña le respondió: “no te asustes mami, era el hermano que tenía con la otra señora que era mi mamá”.

“Mira, es Nicolás”

Una noche me pidieron quedarme al cuidado de mi sobrina. Ya la había cuidado antes, pero esa noche, sus padres tuvieron que llevarla a mi casa. Entonces, antes de ir a dormir, ella me preguntó qué era lo que tenía en una caja de mi armario. Le dije que eran viejas fotos de mi infancia. Ella me pidió verlas y yo saqué las fotos sin problema alguno. De repente ella se detuvo en una foto y me dijo: “mira, es Nicolás”. Yo le dije: “no, es Bruno”. Ella insistió, “no, es Nicolás, un niño con el que jugaba en el parque”. Me dio mucho miedo.

“No te preocupes, no tiene brazos”

En otra ocasión, mi sobrina me invitó a ver películas con ella. Ese día igual nos quedamos solas, pero en su casa. Estábamos viendo la película, cuando de repente ella volteó hacia el sillón en el que yo estaba sentada. Comenzó a reír y sin preocupación alguna me dijo: “tía, ese hombre es muy gracioso”. Yo no supe qué decir, pero tal vez mi cara habló por sí sola. Ella, quizá para calmar mi miedo dijo: “tranquila tía, él no tiene brazos”. Quería salir corriendo de ahí.

La historia de cómo mi prima fallecida regreso a despedirse de mi

Esta es una historia que no cuento a menudo, pero llegando la época de día de muertos en mi país siempre me da nostalgia. Quizás muchas personas no crean lo que viví, incluso mi propia familia decía que estaba mintiendo. Menos mi esposo, que se encontraba a pocos pasos de mi en el hospital mientras ocurrió esta historia.

Mi prima y yo

Mi familia es una de esas familias donde todo el mundo se mete con todo el mundo. Es una familia grande y unida, una típica familia mexicana. Mi prima y yo crecimos juntas, de hecho una viviendo al lado de la otra. Pasamos la infancia juntas y también la adolescencia. Ella era mucho más que solo mi prima, para mi era una hermana. Lamentablemente mi prima tuvo un accidente automovilístico que la dejó en una silla de ruedas. Sin embargo y gracias a Dios eso no la detuvo. Siempre fue la mujer más alegre de mi familia, todos pensábamos que tenía un gran angel. Conforme pasaron los años yo me mude con mi actual marido al estado de Sinaloa. Me dolió mucho dejar a mi prima, sin embargo sabía que ni aún con ese tipo de distancia dejaríamos la hermosa relación que construimos toda nuestra vida.

El hospital

Un día, mi marido me llevo a comer mariscos. No pasó mucho tiempo en que pasamos del restaurante al hospital por una grave intoxicación. Pase dos días en cama en el hospital, puesto que mi situación se había complicado pues yo me encontraba en pleno embarazo. Fue a medio día, que me encontraba en la habitación de hospital cuando vi llegar a mi prima. Vaya qué impresión, venía caminando. Yo simplemente no lo podía creer, estaba muy pero muy feliz de verla. Le pregunté cómo era posible que estuviese caminando y ella me dijo que le habían hecho el milagro. Estaba feliz de que estuviera ahí conmigo. Se sentó a mi lado y me dijo que mi marido le había dicho que me encontraba mala y en el hospital, así que decidió venir a verme lo antes posible.

La charla

Tuvimos una charla de lo más normal, ella me contó acerca de su mamá, mis demás tías y algunos chismes de familia. Nos abrazamos, bromeamos y de un momento a otro me dijo que se tenía que ir. La hora de visita estaba próxima a terminarse. Le rogué que se quedará unos minutos, al menos para que mi marido la viera caminando. Le dije “¡Se va a morir de felicidad!” Ella me dijo que con suerte se lo encontraría de camino fuera del hospital. Me despedí de ella y le dije que me trajera un pan dulce en su visita al próximo día. Ella se fue sonriendo.

Pocos minutos después

Mi marido entró a la habitación y yo le ataque diciendo “¿A que no adivinas quién vino a visitarme?” El se me quedó mirando y entonces procedí a contarle que la Lupe había entrado caminando por el pasillo y me había contado un montón de buenos chismes. Mi marido estaba muy sorprendido, se levantó de la silla cuando acabe mi relato y me dijo “Ay mujer, tengo que decirte algo. Tu prima Lupe murió anoche de un paro cardíaco. “ Yo estaba helada, en ese momento me puse muy pero muy mal. Llore a cantaros, ni siquiera quería creerle a mi marido.

Pero como todo en esta vida, después de la guerra viene la calma. Aunque lloré mucho la muerte de mi Lupe, me quedó el consuelo de verla caminando y contenta. Quizás nadie me crea lo que yo ví, pero lo viví en realidad. Mi hermosa prima se vino a despedir de mi, que descanse en paz.

Historias chiquitas de brujas reales ¡Woow!

Todas hemos tenido un familiar, amigo o conocido que nos ha contado una buena historia de fantasmas o brujas. Hablar del tema en esta época del año, es pasar un rato ameno con cuentos y mitos que vienen ya desde hace muchos años. Para que tengas unas buenas historias que contarle a tus amigas o a tus hijos, aquí te dejo 4 pequeñas historias de brujas reales.

La bruja Agnes Sampson

Hace mucho tiempo las brujas eran mujeres que ayudaban a otras mujeres. En su mayoría eran parteras y curanderas que usaban su conocimiento en hierbas para curar uno que otro mal. Ese fue el caso de Agnes Sampson. Corría el año de 1590, el Rey de Escocia Jaime VI se casó con Ana de Dinamarca-Noruega a quien le daba un gran pavor el asunto de las brujas. Tanto fue así que contagio de miedo a su marido, quien lanzó una revuelta en contra de las brujas. Esto a raíz de que en Escocia se habían manifestado unas terribles tormentas.

La reina en su miedo, le dijo a su marido que eso solo podía ser obra de la magia negra que estaba hechizando a la madre naturaleza.  Comenzaron la cacería y dentro de ella culparon a Agnes Sampson, Geillis Duncan (personaje no tan ficticio de la serie Outlander) y el Dr Jhon Fian. Agnes era una conocida curandera en todo el reino, la pobre fue sometida a una tortura terrible, así fue como murió confesando que era una bruja. Los lugareños dicen que su espíritu se quedo en esta tierra, vaga con la cara quemada llorando por su cruel destino.

La Madre Shipton 

Ursula Southeil, fue una temida y respetada profetisa inglesa del siglo XVI. Se sospechaba que la madre de Úrsula también era bruja. Era una mujer horrible y desfigurada según cuentan las historias. No obstante a pesar de tener un rostro feo, era la más grande clarividente de Inglaterra. Era comparada con Nostradamus. Algunas de sus más acertadas profecías fueron: La Armada Española, la Gran Plaga de Londres, el Gran Fuego de Londres, la ejecución de María Reina de los Escoceses. De hecho algunos dicen que sabía de la invención del Internet “alrededor del mundo los pensamientos volarán en un abrir y cerrar de ojos”.

Muchas han sido las profecías en las que está mujer acertó y aun algunas parece que se cumplirán como el estallido de la tercera guerra mundial y la llegada de los extraterrestres. “Una serpiente plateada se verá y arrojará hombres de extraño semblante, mezclándose con la nueva tierra… estos extraños hombres aclararán las mentes del hombre futuro. Éstos se mezclarán y mostrarán cómo vivir. Y La edad de oro se iniciará de nuevo”. Esta bruja murió de causas naturales se dice que fue enterrada en un terreno impío en los bordes exteriores de York alrededor de 1561.

Las brujas de Atlixco

En un pueblito de México, llamado puebla hay una historia que pone a temblar a chicos y grandes. Se dice que todas las noches las madres del pueblo rezaban mientras las bolas de fuego que colaban en el cerro bailaban. Según cuentan, estas mujeres se quitaban las piernas y se ponían unas de guajolote. Después volaban en escobas hechas con ramas secas y juntas convertirse en bolas de fuego que bajaban del cerro para encontrar niños, borrachos y parejas enamoradas a quienes chuparles la sangre. Esta leyenda aún persigue a la gente que vive cerca del cerrito de San Miguel. 

Está científicamente probado: los fantasmas existen

¿Cómo que los fantasmas existen? Muchas personas se han preguntado acerca de la existencia de estas “entidades” y otros aseguran haberlos visto. Otros se mantienen escépticos, pero lo cierto es que hay un nuevo estudio científico que asegura que los fantasmas sí existen. Aquí te cuento todo sobre el tema y el estudio que lo prueba.

¿Qué es un fantasma?

Empecemos por definir qué es un fantasma, aunque claro, es un concepto muy abstracto. Normalmente se dice que un fantasma es una entidad o espíritu con características humanas pero intangible. Estas apariciones son perceptibles a nuestros sentidos, a veces con los 5 sentidos y otras tantas, sólo escuchamos, olemos o vemos. Lo cierto es que a lo largo de la historia y en todas las culturas hay mil y un historias de fantasmas. Y piénsalo: ¿qué sería del cine de terror sin ellos?

Pongámonos serias

Tanto se habla de fantasmas que hay muchas investigaciones al respecto e incluso gente que se hace llamar cazafantasmas. Aunque el tema es tan complicado que muchas ya no creen en ello. Lo que no sabes es que hay un nuevo estudio realizado por científicos en la Universidad de Milán, Italia, que concluyó que los fantasmas sí existen. Lo creas o no, la fuente suena bastante confiable.

El estudio

Este estudio concluyó que todo viene durante el proceso de duelo después de haber perdido a un ser querido. Y lo que afirman es que 6 de cada 10 personas han visto u oído a un ser amado después de su muerte. Aunque la mayoría no lo cuenta por temor a que los tachen de locos.

Experiencias extrasensoriales

El punto aquí es que estos científicos denominaron a estas apariciones como “experiencias de presencia continua”. Es decir, personas ya muertas que se aparecen de manera involuntaria a sus seres queridos aún vivos. El tema a considerar es que de todas las personas que estudiaron y afirmaron haber visto fantasmas, ninguna de ellas sufría de alguna alteración psicológica o mental. ¡Todos estaban completamente sanos! Así que bueno, al final podemos decir que todo depende del cristal con que se mira. ¿Tú qué opinas?

¿Los fantasmas existen?, ¡la ciencia lo explica!

Cuando se acerca el Día de Muertos y el Halloween solemos hablar sobre las experiencias sobrenaturales que hemos vivido. Muchos ponen en duda que estas cosas ocurran y, sobre todo, dudan que existan los fantasmas. Si te has hecho está pregunta entonces es mejor que leas esto. Quizá creemos que vemos fantasmas por otras causas y no porque de verdad existan, ¿o tú que piensas?

¿Está comprobado que existen?

A pesar de que hay muchas leyendas y mitos acerca de los fantasmas, hay personas que aseguran que los han visto. Todavía no se ha comprobado que de verdad existan, pero nos encanta crear historias alrededor. Varios expertos han hecho investigaciones sobre este fenómeno, incluso hay otros que se dedican a perseguir y cazar fantasmas. Sin embargo, hasta el momento no hay un estudio o una fuente que demuestra la existencia real de un ser fantasmagórico.

La ciencia dice…

Se dice que por las noches estos seres hacen de las suyas. No obstante, de acuerdo a una investigación, la gente que asegura haber tenido contacto con un fantasma es por que se encontraban en un estado alterado de conciencia. Esto puede ocurrir cuando dormimos, nuestra mente está alerta pero nuestro cuerpo está dormido. A esto se le conoce como el sueño despierto, la mente al estar vigilante crea escenas muy reales pero que son falsas. Por lo que ver fantasmas solo esta en la mente.

Todo tiene una explicación

Para la ciencia, ver fantasmas tiene una explicación científica. Por ejemplo, personas comentan que cuando están en la presencia de un fantasma la temperatura suele bajar. Para los expertos esto solo es una sensación relacionada al temor que sentimos. Se trata de una corriente de aire frío que está cerca de donde te encuentres en ese momento. Otra de las razones por las que podemos ver fantasmas es debido a los campos electromagnéticos. Estas instalaciones eléctricas afectan a nuestro cerebro haciendo que produzca alucinaciones y veamos fantasmas.

A pesar de que la ciencia afirma que no existen ¿Tú que crees? ¿Has tenido experiencias paranormales?